¿Cuándo se decidirá apostar por la eficiencia energética en el diseño?

En cualquier edificio de más de 10 años, se pueden detectar errores de diseño desde el punto de vista de la eficiencia energética. Tradicionalmente se han proyectado edificios desde enfoques muy distintos, pero rara vez pensando en los costes energéticos. El coste energético y el consumo de energía procedente de origen fósil, sin importar los niveles de emisión de CO2, no eran un problema. Tampoco existía una conciencia política promotora de ahorro o reducción de consumo energético.

El panorama ha cambiado sustancialmente. Hoy día la necesidad de ahorrar energía se plantea no solo a quienes son responsables de un edificio en explotación sino también a los que encargan la proyección de uno nuevo y por ende, a los proyectistas. Sin embargo seguimos viendo cómo, obedeciendo a criterios basados en reducir el coste origen, se toman decisiones que, si bien abaratan el proyecto inicial, suponen un coste mayor a la larga para la inversión. Es fácil calcular de antemano, con acierto relativo, los costes energéticos de explotación que va a suponer una nueva instalación estándar, una vez puesta en marcha, respecto a un modelo más eficiente.

Existe información, empresas especializadas como Sernoven y motivos de sobra que ayudarán en la toma de decisiones acerca del diseño y la construcción de un edificio.

Por tanto, el arquitecto puede integrar un equipo tradicional y añadir personal experto en diseños eficientes para garantizar un resultado.

Sin embargo seguimos viendo diseños que, seguramente han abaratado el coste de origen pero, desde el punto de vista de la eficiencia energética, reflejan errores conceptuales. Los decisores deben tomar conciencia de que en el momento de la puesta en marcha y de empezar a asumir facturas de suministro, el coste es propio y penaliza en la amortización de la inversión. Hablamos por tanto de diseño eficiente, no solo de maquinaria o elementos eficientes. Si queremos tener instalaciones de consumo reducido, debemos proyectarlas desde una visión holística aplicando criterios de eficiencia a todos los factores posibles: maquinaria, componentes, diseño, materiales, etc. La diferencia de coste no siempre penaliza a un diseño eficiente respecto a uno tradicional, pero seguro ahorrará en los costes energéticos de explotación con garantía.

Geotermia en Bodegas

¿Qué es la energía geotérmica?

Se trata de una técnica de aprovechamiento del calor de subsuelo para diversos usos, por ejemplo en bodegas, creando sistemas de refrigeración sostenibles y de alta eficiencia.

La forma de aprovechar está energía renovable y aplicarla al servicio del vino se realiza mediante la instalación de bombas de calor geotérmicas, cuyo rendimiento energético, inalterable a pesar de las condiciones ambientales, asegurará la producción de calor/frío para cubrir la demanda térmica de la bodega con una altísima eficiencia.

 

Necesidades térmicas a cubrir por la geotermia en Bodegas

La producción de frío/calor en una bodega es imprescindible desde la entrada de la uva hasta la puesta en el mercado de la botella de vino:

  • Enfriamiento inmediato uva recogida para mantener los aromas y evitar la oxidación prematura así como el inicio incontrolado de las fermentaciones.
  • Mantenimiento de los depósitos de fermentación refrigerados para buscar la temperatura óptima de fermentación.
  • Calor para realizar la fermentación malolactica.
  • Estabilización del vino a bajas temperaturas para evitar la presencia de precipitados en las botellas cuando llegan al consumidor.
  • Cuidado de la temperatura de las salas de barricas donde permanecen los vinos durante largo tiempo para su crianza en botellas hasta su salida al mercado.
  • Climatización de espacios anexos; oficinas, restaurante, comedor, almacenes, centro de interpretación, etc.

 

Ventajas de la geotermia en la elaboración del vino

El sistema de producción de agua fría/caliente por geotermia provoca una reducción considerable del consumo energético de al menos un 50%, como mínimo respecto al sistema convencional. Este sistema permite además cubrir la potencia térmica de los procesos de una bodega con menor potencia eléctrica instalada que un sistema convencional, produciéndose por ello un ahorro adicional considerable en el término potencia de la factura eléctrica. Se trata de una energía sostenible y natural cuya implantación en el mundo del vino es ya una realidad.

Actualmente SERNOVEN está realizando un Proyecto de Geotermia para una nueva Bodega en Requena cuyas características detalladas a continuación harán que se convierta en un proyecto referencia.

  • Equipos: uds bomba de calor de 100kW de potencia de ciclo abierto
  • Inversión Prevista: 385.000€
  • Ayuda concedida IVACE: 114.000€
  • Ahorro Costes Energéticos: 25.000€/año (sobre solución tradicional)